En 2020, una importante instalación química en Polonia puso en marcha un proyecto fotovoltaico (PV) comercial e industrial (C&I) a gran escala de 1,5 megavatios (MW), lo que marcó un hito importante en el camino hacia la sostenibilidad de la instalación.
El proyecto implicó la instalación de inversores SPI60K-B de última generación, que han sido cuidadosamente seleccionados para optimizar el rendimiento y la eficiencia del sistema fotovoltaico. Al aprovechar la energía del sol y generar electricidad renovable en el lugar, la instalación química ahora está cosechando beneficios financieros y ambientales sustanciales.
Una de las principales ventajas de este proyecto fotovoltaico sobre tejado de C&I de 1,5 MW es el importante ahorro de costes que ha generado para la instalación química. Al reducir la dependencia de la instalación de la electricidad suministrada por la red, el sistema fotovoltaico ha permitido a la empresa compensar una parte considerable de sus gastos energéticos, lo que se ha traducido en importantes ahorros financieros a largo plazo.